¿Criptomonedas como el futuro para las empresarias bolivianas? "Women in Crypto" enciende el debate sobre el liderazgo femenino en tiempos de crisis
En el contexto del Día de la Mujer Boliviana, más de 200 empresarias y emprendedoras se reunieron en Cochabamba para discutir un tema que, para muchos, es controvertido: el rol de las mujeres en el mundo de las criptomonedas y la tecnología blockchain. Este evento, que prometía ofrecer soluciones financieras innovadoras, no solo captó la atención de las participantes, sino que también encendió un debate más amplio: ¿Son las criptomonedas una respuesta viable a la crisis económica que enfrenta Bolivia o un riesgo disfrazado de innovación?
Magaly Castro, presidenta de CAMEBOL Cochabamba, no dudó en subrayar la gravedad del momento económico que atraviesa el país. "Ante la falta de divisas, las mujeres están buscando soluciones más audaces", señaló. Y aquí es donde entra la criptomoneda, vista por algunas como una tabla de salvación financiera y por otras como un terreno incierto que podría empeorar los problemas.
Durante el evento, André Canelas, experto en tecnología financiera, guió a las asistentes a través de los intrincados caminos de blockchain y las criptomonedas, mostrando cómo estas tecnologías no solo son una opción de inversión, sino una oportunidad para que las empresarias se independicen del sistema financiero tradicional. En un país donde el acceso al crédito bancario es limitado y las transacciones internacionales pueden ser una pesadilla, la promesa de las criptomonedas como herramienta de empoderamiento es tentadora.
Sin embargo, la apuesta no está exenta de riesgos. Críticos del evento señalan que mientras las criptomonedas ofrecen soluciones innovadoras, también son altamente volátiles. ¿Es prudente que las mujeres empresarias, muchas de ellas al frente de pequeñas y medianas empresas, apuesten por activos cuyo valor puede desplomarse de la noche a la mañana?
Claudia Ballesteros, especialista en empoderamiento económico del Proyecto TEA WEEB de CECI Bolivia, lanzó un mensaje audaz: "Las mujeres son clave en la transformación económica de Bolivia". En un país donde el sistema financiero parece haber dejado atrás a muchas empresarias, las nuevas tecnologías, como las criptomonedas, son vistas como herramientas revolucionarias que permitirán a las mujeres estar a la vanguardia. Pero esta narrativa también tiene su lado oscuro: el riesgo de apostar por herramientas inexploradas podría dejar a muchas sin el colchón financiero necesario para enfrentar la inestabilidad económica.
Las experiencias compartidas por empresarias que ya usan criptomonedas en sus negocios aportaron un toque de optimismo. "Mayor agilidad en las transacciones y un manejo más seguro de las finanzas", fueron algunos de los beneficios destacados. Pero no todos están convencidos. En un país donde las fluctuaciones económicas ya son una constante, apostar por un sistema tan volátil podría ser peligroso.
Más allá de las criptomonedas, el evento tocó un punto crucial: la necesidad de visibilizar el rol económico de las mujeres, a menudo invisibilizado, y crear redes de apoyo sólidas. Estas redes, argumentan las organizadoras, son esenciales para enfrentar los desafíos del mercado, y el taller no solo fue un espacio de aprendizaje técnico, sino también de fortalecimiento colectivo.
Iniciativas como "Women in Crypto" apuntan a algo más profundo que el simple manejo de criptomonedas: buscan desafiar las estructuras tradicionales que han mantenido a las mujeres al margen del poder económico. Sin embargo, queda la pregunta en el aire: ¿están las criptomonedas realmente listas para sostener la carga de un cambio tan grande, o estamos viendo el inicio de una nueva burbuja tecnológica?
Lo que está claro es que las mujeres bolivianas no se están quedando de brazos cruzados. Están tomando el control, explorando nuevos territorios financieros y transformando las crisis en oportunidades. Mientras Bolivia enfrenta uno de sus momentos más complicados en términos económicos, el liderazgo femenino en la innovación financiera podría ser la pieza clave para un futuro más inclusivo, pero la apuesta por las criptomonedas sigue dividiendo opiniones.
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